Imagen: Cortesía EFE |
En la actualidad es uno de los
referentes más importantes de la narrativa en su país y goza de un inmenso prestigio a
nivel internacional, sobre todo, aquí, en España, sin embargo, el escritor
peruano Alonso Cueto no lo ve así y evalúa su quehacer literario y lo obtenido
hasta el momento diciendo “lo que hago no tiene ningún mérito porque es una
respuesta a una obsesión”.
Les invito a conocer más a
profundidad a este autor que por estos días promociona su novela La Pasajera, la que por cierto, ya ha
sido llevada a la pantalla grande con el nombre de Magallanes.
Eres un escritor muy bien considerado tanto en tu país como más allá de
sus fronteras, e incluso, he escuchado decir por ahí que posees todos los
méritos para que en un futuro nada lejano seas considerado firme candidato al
Premio Nobel de Literatura, ¿ha sido complicado hacerte un espacio como
escritor? ¿Cómo enfocaste tu carrera?
¿Atribuyes tus logros al trabajo o la buena suerte? O como suelen decir algunos
‘a la fortuna de estar en el momento y
lugar exactos’.
Una de sus exitosas novelas |
En realidad, lo que hago no tiene
ningún mérito porque es una respuesta a una obsesión. Por algún motivo que
desconozco me despierto todos los días con la única intención de ir a
computadora y escribir. No puedo pensar en otra cosa. Cuando estoy en alguna
otra actividad, pienso en lo que estoy escribiendo y cuando sueño, mis
personajes a veces se aparecen. Tengo una naturaleza obsesiva y felizmente
tengo las facilidades de poder liberarme de esa obsesión cediendo a ella. Me
parece que inventar personajes, situaciones, diálogos, es la forma más feliz de
vivir, si se la puede llamar felicidad.
¿De qué manera ha influido en tu filosofía de escritor la personalidad y obra de Juan Carlos
Onetti? Y en esta línea, ¿qué voces, no
necesariamente literarias, tienes presente a la hora de escoger tema para tus
obras?
Onetti escribió para siempre lo
que ocurre en la conciencia de los solitarios, los marginados, los
desencantados del mundo. La primera vez que topé con él fue a través del relato
Bienvenido, Bob y desde entonces me
sentí sumergido en su mundo.
¿Cómo aprecias la evolución de
tu trabajo literario desde tus primeros cuentos y novelas hasta la fecha en que
sale a la luz tu nueva obra La Pasajera?
¿Cuáles fueron esos cambios y en qué persististe?
No sabría decirlo. Siempre me ha
interesado la manera como los personajes se relacionan con su pasado. Creo que
en algún momento de nuestras vidas descubrimos la complejidad del pasado y las
emboscadas de la memoria. Mi primer libro La
Batalla del Pasado tenía que ver con ese tema, y creo que La Pasajera también. La tranquilidad de
una persona depende de las relaciones con su pasado.
¿En qué piensas cuando definen
algunas de tus obras como novelas de sentimiento? ¿Tienen razón?
Todas las novelas son de
sentimiento. No puedo entender una novela que no explore las emociones. Pero lo
que me interesa más son las emociones escondidas, las que ni siquiera el
personaje sabía que tenía.
¿Cuán implicado te sientes con
la naturaleza de tu narrativa? ¿Es riesgoso escribir cuando afloran los
sentimientos? ¿Puede ser perjudicial?
Un escritor tiene que haber
sufrido, amado y haberse sentido frustrado, pero también haber tomado distancia
de todo eso para convertirlo en su materia de trabajo. De allí viene la famosa
frase de Graham Greene que dice que un escritor debe tener un trozo de hielo en
el corazón
Pelicula basada en su novela Grandes Miradas |
¿De dónde emergen tus historias? ¿Hay un momento de revelación?
Vienen de alguna frase que
escucho, de una noticia en el periódico. A veces basta con ver caminar a una
persona por la calle para adivinar lo que pasa con ella.
Una vez que tienes la idea clara de lo que vas a escribir, ¿cómo
planteas tu trabajo? ¿Te das un plazo para culminarlo?
Nunca me doy un plazo pero el
cuerpo me dice que en algún momento tengo que dejarlo. Escribo hasta que el
cuerpo aguante. Escribir es imaginar y la imaginación es un músculo.
¿Por qué gustan tanto tus novelas en el exterior? ¿Cuál es la clave de
tu éxito? ¿Se halla la causa en tu temática o tu forma narrativa, o la suma de
las dos?
No creo tener demasiado éxito.
Un personaje de tu talla está más expuesto a ser evaluado por la
opinión pública tanto para bien como
para mal. ¿Te afecta la crítica? ¿Cómo la enfrentas? ¿Te preocupa lo que la
gente piensa de ti?
La crítica siempre me interesa
pero como una forma del ensayo. Me interesa que una reseña tenga ideas y que
las desarrolle, no que haga comparaciones y dé opiniones gratuitas.
Incursionaste también en el periodismo, ¿es verdad que quienes hacen
redacción periodística ya tienen mucho terreno ganado a la hora de hacer
literatura? ¿Es eso cierto? ¿Cuál es tu experiencia?
El periodismo te ayuda mucho a
condensar un texto, pero no se puede convertir en un hábito permanente.
Saramago dice que el periodismo le enseñó a saber cómo lo que se puede escribir
con diez palabras también se puede escribir con nueve. No hay que abusar de
eso, sin embargo. También se puede escribir con once.
Ejerces la docencia universitaria, ¿cómo abordas tu tarea y cuál es tu
pedagogía? ¿Eres amigo de tus alumnos?
Soy amigo de los alumnos a veces.
Me interesan las clases donde todos participen.
¿Qué tanto interés detectas en tus alumnos hacia la literatura?
¿Leen? ¿Poseen un vocabulario aceptable?
En los alumnos de la Universidad
Católica veo mucho interés y formación.
La pasajera llevada al cine |
Sé que ahora estás vinculado a las redes sociales, ¿cuánto tiempo le
dedicas al Facebook? ¿Te gusta ese tipo
de comunicación? ¿Cómo te ha cambiado la vida, si lo ha hecho?
El Facebook es la gran plaza
pública. Pero no le dedico tanto tiempo. Es un modo de saber cómo están los
amigos y a veces de ver un poema, un cuadro, una entrevista o un artículo
interesante.
En tu más reciente obra La
Pasajera vuelves a abordar los efectos del conflicto armado padecido
en Perú, ¿todavía hay mucho que decir al
respecto? ¿Aún constituye un fantasma que nos ronda? ¿Estamos lejos de superarlo?
Sí, porque la guerra es un
espacio en el que se revelan los traumas escondidos de la sociedad y de las
personas. Aparecen los más nobles y los más viles de los seres humanos en toda su
extensión. El episodio de Sendero Luminoso es el más importante de nuestra vida
republicana, al igual que la guerra con Chile y la inmigración.
Para ese y muchos casos, ¿la literatura puede servir para sanar viejas
y recientes heridas? ¿Exponerlo ya es un gran avance en el proceso de sanación?
Una sociedad tiene que mirarse en
sus heridas y un escritor, como cualquier artista, puede contribuir a ese
papel. Liberar la caja de Pandora de una sociedad es esencial, sobre todo en
una sociedad que tapa sus heridas como la peruana.
¿Asumes tu rol de escritor con una perspectiva más trascendental como
dejar una huella que sigan los demás? ¿Algo
así como ser inmortal a través de tus obras?
Creo que en general leer,
escribir, escuchar música, ver una gran película con los únicos antídotos que
hemos inventado contra la muerte. Las palabras, las imágenes, los sonidos
quedan.
Con la autora de la nota en la Feria del Libro de Guadalajara |
Varias de tus novelas han sido llevadas a la pantalla grande con gran
éxito, pues han ganado importantes premios en el exterior, la última fue
justamente La Pasajera que se
convirtió en el cine en Magallanes,
¿participas en la producción de estas de alguna manera, se toma en cuenta tu
opinión? Y lo más importante, al margen
de los logros cosechados como películas, ¿has estado de acuerdo siempre con las
adaptaciones?
Magallanes es un magnífico
proyecto y va a ser una gran película. Estuve muy de acuerdo con la adaptación
muy original y brillante de Salvador del Solar.
¿Es verdad que eres una persona muy introspectiva y solitaria? ¿A qué dedicas tu tiempo libre? ¿Qué te atrae
además de la literatura?
Es verdad que soy muy solitario
pero valoro mucho la amistad y creo que no tengo demasiados amigos. Sin
embargo, los busco con mucha frecuencia. Me atraen la música, el cine y también
el deporte.
¿Cuál es tu próximo paso literario? ¿Ya hay en mente una nueva historia?
Tengo una nueva historia pero
prefiero no hablar de ella, por ahora.
¿A qué aspira Alonso Cueto como persona y escritor?
Seguir escribiendo y seguir
leyendo, seguir viviendo esa vida que es la más rica y plena de todas.
Si desean saber más del autor o su obra pueden pinchar los siguientes enlaces: http://www.alonsocueto.com.pe/ https://www.facebook.com/alonso.cueto.1?fref=ts |