Fue primero médico. Más tarde se
descubrió como poeta en circunstancias que necesitaba salir de sí misma y darse
a conocer. A partir de allí, su vida dio un giro completo tanto en lo personal
como en lo creativo. Se adentró en el mundo
de la poesía con una forma de escribir diferente que llama mucho la atención y
genera controversia, pues ha introducido en sus versos la terminología médica, aporte o innovación que no ha sido muy bien recibido por quienes se oponen
al 'mestizaje literario'.
Les invito a penetrar en el
cuerpo poético de María José Pastor, una escritora que afirma convencida:
"La poesía nos penetra y cuando tienes imágenes del cuerpo a nivel
microscópico la ves fluir por él".
Eres una médico
involucrada en el mundo de los versos, ¿cuánto de poesía hay en nuestro
organismo que has podido reflejar en tus escritos?
Somos cuerpo y somos poesía. Se
trata de ver ambas facetas del individuo y no tener miedo a experimentar su
fusión.
Somos poesía porque-lo sintamos o
no- estamos en el mundo rodeados de objetos, de sucesos y del propio cuerpo y
mantenemos una relación con ellos de una forma especial que a menudo no
percibimos. No es una relación como la que se describe de forma lineal tanto
por los medios de comunicación como en la literatura en prosa. Es una relación rizomática en la que las
palabras se relacionan entre sí formando redes.
Muy concentrada en su faceta de médico analista |
Fruto de ello son los poemas que
son capaces de crear entidades complejas al combinar palabras de distintos
campos semánticos que arrastran connotaciones de ritmo y ambientes evocadores que
dan multidimensionalidad a la experiencia y al conocimiento.
La poesía nos penetra y cuando
tienes imágenes del cuerpo a nivel microscópico la ves fluir por él.
La palabra carnal
sagrada si se conecta con los humores
que recorren tejidos nutriendo espacios
y células y posee
esa plasticidad de quien está en camino.
La palabra se mueve
y su estela sacude textos
y ablanda fibras y las deforma
rejuvenece puentes perfora muros.
La palabra tiene membranas poros
por donde escapa un gel de extrema
ligereza
capta mensajes y abandona
el texto inicial en busca de aventura.
La palabra se arquea bailarina
sobre las puntas romas
promiscua
presta cada faceta al mejor postor
tira del hilo y engendra el hilo
y la melodía fluye a través del cobre
y hiere
con ebriedad que te navega que te circula.
.
Entonces es eje virtual silencio de raíces
un remolino una borrasca
un parásito abecedario móvil
en los tejidos.
( La palabra microscópica,
libro inédito)
El libro que le abre las puertas al mundo literario |
Por regla general cuando
construyo un libro me lo planteo como una unidad de pensamiento. Un hilo
conductor que guía los poemas que lo conforman. Lo físico es secundario aunque
es omnipresente y necesario a la vez que condicionador del libro.
Pero ¿cuándo se gestó
María José la poeta? ¿Fue antes que la médica?
No primero fui médico. Empecé a
escribir en 1999 poco antes de terminar mi tesis. Coincidió también con un
cambio vital importante. Tal vez el esfuerzo de condensación de toda la
información fue el desencadenante juntamente con la necesidad de salir de mí
misma.
¿Qué tuvo que ver el
poeta Ricardo Llopesa en tu decisión de mostrarte como poeta?
Empecé asistiendo a sus tertulias
y allí me encontré en un medio de
cultivo ideal. Hablaba de poesía con los compañeros contertulios, empecé a leer
mis poemas en un ambiente protector y amable. Supe que aquéllo me atrapaba en sus
redes y que me gustaba sentirme atrapada.
¿Por qué escribes
poesía? ¿Qué te condujo hasta ella?
Julia Kristeva habla de retorno a
la jorá. Ese lugar antes del lenguaje del padre, antes de que el individuo se
vea reflejado en el espejo (Lacan) y adquiera un lenguaje lineal y simbólico.
Sería un retorno a un estado anterior de fusión con la madre. El lenguaje
entonces tendría otros componentes que acompañaban a la palabra.
Sea esto verdad o no - ¿Qué es
verdad?-, me parece interesante.
Recorro
ese trayecto hacia los verbos
que
levitando en azar se engarzan
y
entre sus hilos mis alas catalizan
y
enlazan y tejen la escritura.
Camino
hacia el recinto en que hechos aire
desnacen
de su esencia mientras yo
apenas
soy presencia y desconozco
los
signos convenidos.
O
me deslizo a lo profundo buceando
en
busca de la espuma el burbujeo
en
busca del bullicio donde hierven.
Y
observo con los párpados cerrados
cómo
pulsan mis células de nieve
cómo
cabalgan curiosas las palabras
a
lomos de pegasos que se besan.
Y
me desplazo sin brújula y a tientas
con
los brazos tendidos como el ciego
que
palpa hasta topar con lo seguro
y
se abandona y se disuelve y se cobija
y
se mece con la música
del
esférico vientre de su madre.
(Del libro Ecuaciones recicladas)
En la foto de familia tras un acto literario |
No quiero llegar a ningún sitio.
Escribo por el placer que me proporciona el proceso de escritura, los poemas
acabados, la relación que a través de ellos establezco con la gente. La poesía
me engancha, supongo que, como dice Christian Pringent en un intento de
fundirme con las cosas y con las
personas .
En 2003 te conceden el
Premio del IV Certámen Literario Tertulandia 2003 de Benetúser en la
modalidad de poesía con Autonomía del
Deseo, ¿con qué expectativas participaste y qué objetivos cumpliste?
Uno se presenta a los concursos
sin muchas expectativas pero siempre con la idea de ser querido y con la falsa
idea de que ellos pueden validar tu escritura. Pronto se aprende que eso no es
lo importante. Pero siempre es agradable.
Sobre tu primer libro
has declarado que "una vez que los individuos crean sus deseos, estos se
independizan, tienen autonomía y se defienden por sí mismos", ¿quiere
decir que nuestros deseos nos arrastran y ya no tenemos el control sobre ellos? Explícanos, por favor.
No, no es que nos arrastren es
que nos envuelven formando una atmósfera ionizada a nuestro alrededor. Son como
gases conductores de la energía que hay entre los individuos. Además
considerando que los supuestos límites que nos conforman son membranas
permeables, los deseos se introducirían en los individuos y serían capaces de
formar parte de ellos y por tanto de condicionar sus existencias. Digamos que
son inevitables. Es un ejercicio de visualización de una realidad invisible.
Es una mujer con mucha curiosidad por la vida |
Bueno, eso lo vi a posteriori.
Los poemas fueron fruto de una idea inicial de recuperación de lo que creía
importante y fue construyéndose de forma crítica frente a aquellos aspectos
sociales que sentía próximos.
Me remito al significado
y alcance de la palabra resistencia, ¿a qué te resistes, María José?
Me resisto a la manipulación
constante que sufrimos los individuos inmersos en una sociedad cuyos poderes fácticos te van marcando pautas
acerca de lo que definen como importante.
¿Sigues pensando que el
individuo es capaz de modificar su realidad? Y si es consciente de ello y
sencillamente no quiere hacerlo, ¿estamos condenados a sufrir eternamente por
gusto?
Creo que sí somos capaces de
modificar las cosas pero desgraciadamente nos cuesta mucho darnos cuenta del
poder de la ciudadanía. Creo además que tenemos miedo a movilizarnos. Estos
pensamientos son de rabiosa actualidad.
No es que no queramos modificar las cosas en favor de una
sociedad más justa, es que son muchos los intereses que van en contra de que
las cosas cambien.
Por supuesto no es fácil pero hay injusticias flagrantes que
todos sabemos que podrían ser mejoradas.
Nada es irrevocable, autoinventemos.
Rescatemos el valor de la avalancha,
del alud de miles de moléculas,
celebremos la blancura inevitable alfombrando la miseria.
Aunemos nuestros nómadas esfuerzos
a la luz solar del grito humano
Su segunda publicación poética |
Una espora es un germen que
resiste en condiciones desfavorables. En mi poemario las esporas de cordura podrían
guardar en su interior valores que sería interesante rescatar. Por ejemplo el
sentimiento de comunidad, la capacidad de unirse y relacionarse de una forma
más generosa, ajena a las leyes del mercado. Se ha ganado mucho en
individualidad pero se ha perdido en empatía.
Esporas de
cordura,
esporas en
tiempos de sequía
esferas de feroz
sabiduría
arte para
recordar la historia
núcleos de
resistencia germinados
brotes de
humanidad otra vez virgen
¿Es verdad que este
poemario lo escribiste mientras navegabas en internet? ¿Qué buscabas?
Fue un divertimento. Buscaba contrastar
y acompañar mis ideas con textos escritos por otros y que cito a modo de
artículo científico o tesis.
Me gusta la intertextualidad,
creo que la conversación con otros genera textos ricos y dialogantes.
Tu tercer poemario se
titula Plomo papilas pluma (sin
comas) y se refiere al cuerpo y a la
escritura, ¿a qué hace alusión esta combinación de términos y qué
quieres contar con ellas de manera individual y colectiva?
El libro surge tras la lectura y
la asistencia a un curso impartido por Hélène Cixous en el Escorial. Tiene ecos de las
lecturas de las escritoras feministas, también de Derrida y Deleuze.
Es un trayecto desde la pesantez
del cuerpo a la liberación por la escritura pasando por la sensibilidad, De ahí
el título: Plomo por la pesadez, Papilas por la sensibilidad, Pluma por la
escritura.
Acompañada de varios compañeros del mundo poético |
“y ello nos abre otra de las claves
referenciales para situar la poética de María José Pastor, que se inscribe
dentro de lo que se ha dado en llamar “escrituras del cuerpo”. Esta tendencia
se desarrolla a partir del giro lingüístico que en la filosofía propiciaron las
corrientes postestructuralistas, sobre todo en Francia. Frente a la
preeminencia del sentido, el significado aparece como el producto de la
yuxtaposición de significantes; emerge la mirada hacia la materialidad de los
discursos. La escritura, el trazo, la huella y su dispersión se convierten en
elementos para destronar y desvelar la hegemonía del “Logocentrismo” (Derrida), profundizar en “el placer del texto” (Roland Barthes), se evidencia cómo el saber, en su bifronte
dimensión de poder, “penetra los cuerpos” (Foucault), explora el deseo (Lyotard), en una simbología biológico-cartográfica (Deleuze). Esta inflexión teórica adquiere una nueva
dimensión en pensadoras como Hélène Cixous y Luce Irigaray, quienes indagan en la escritura del cuerpo
sexuado, del cuerpo femenino.”
¿Alguna vez te has
sentido discriminada por venir de otro ámbito que no es el literario? ¿Hay
resistencia a este tipo de 'mestizaje'?
Es una creadora a la que le gusta el mestizaje artístico |
Creo que es un error cerrar
puertas, formar grupos. Solemos tender a encontrarnos más cómodos en aquello que
conocemos. Literatura que habla de literatura. Sospecho que bajo el argumento
de que esto no es para gente de ciencias se nos considera intrusos y de algún
modo competidores. Nada más lejos de mi
interés que competir con filólogos. Se trata sencillamente de expresar una
necesidad de forma personal, sin pretensiones.
Participas con
frecuencia en antologías poéticas, ¿qué tipo de aprendizaje o experiencias
extraes de ellas?
Escribir poemas para una
antología temática me ha obligado a desarrollar la creatividad puntualmente.
Trato de escribir un poema para la ocasión y eso me estimula.
En otras antologías he
participado con poemas que ya tenía escritos. Por ejemplo “por donde pasa la poesía” recoge los poemas que
en principio estaban pensados para otro libro porque me pareció interesante que
estuvieran en esa antología.
María José sostiene que hay que mirar siempre |
Inicialmente me daba la sensación
de ser visitada por las musas. Luego prevaleció la idea de escribir sobre un
tema. Ahora sé que hay que preparar el terreno, estar disponible. Vivir de una
determinada forma. Hay que situarse en el margen, mirar las cosas y a uno mismo
con un continuo ejercicio de enfoque y desenfoque, de cizallamiento, de
porosidad. Con un continuo ajuste de las escalas desde lo microscópico a lo
filosófico pasando por lo sensible.
Se trata de cultivar la mirada.
En este sentido tras mis cursos de fotografía creo que hay que aprender a
mirar. Mirar con los ojos abiertos, mirar con los ojos velados, mirar con los
ojos cerrados pero siempre mirar.
La
red lanzada desde el umbral del párpado
el
intento ambicioso de atrapar
la
capa interna de las cosas
los
espacios que anidan electrones
el
vuelo del aire en la memoria.
De
párpados adentro es de color violeta
de
nudos remendados.
La
red experta que se lanza
con
su arteriosclerosis sus dosis de sosiego
sus
movimientos vanos.
El
arte de la pesca de las noches.
De
puertas para adentro
las redes de los párpados
recogen
su cosecha.
Afirma que ni ella sabe quién es en su poesía |
Escribo en el ordenador. Es una
herramienta fundamental que te permite hacer versiones y versiones. Eso no
quita que tome notas en papel de forma esporádica.
En poesía, aparte de
Sábato, ¿qué poetas alimentan tu espíritu y te animan a escribir?
Valente, Paz, Claudio Rodríguez, Gamoneda,
Juarroz, Lorca, Pizarnik, Chantal Maillard. Abelardo Linares. Félix Grande,
César Vallejo, Huidobro, Pessoa, Elliot.
Clarice Lispector, María
Zambrano.
¿Cómo funciona una
médico que tiene el alma de poeta o viceversa?
¿El poeta llega a tener conflictos con la ciencia?
Para nada. Todos tenemos facetas
distintas, fragmentos que nos definen a la vez que van evolucionando e
indefiniendo. Somos mestizaje. Es inevitable mezclar disciplinas. No hay que
empeñarse en ser estancos, puristas, en ser algo concreto. Se es un compendio
de facetas en continuo trayecto. Yo creo
que esta mezcla además de necesaria es positiva. El producto que segrega cada
persona es único, fruto de sus experiencias, sus conocimientos, su creatividad.
¿Pensando en fines prácticos y terrenales de qué le sirve a una médico
ser poeta?
No se es poeta con fines
utilitarios. Pero en todo caso es divertido, por ejemplo, explicar que la
glucemia de un diabético es como la foto de un radar al principio del túnel y
que la hemoglobina glicosilada se calcula midiendo el tiempo que tardas en
atravesar el túnel y ya que se
sabe su longitud puedes calcular la velocidad media a la que has circulado.
Además combinar
imagen y texto es una forma de mestizaje que atrae.
¿Cómo encajan tus aficiones, tales como la fotografía o tu gusto por
customizar ropa y muebles con la escritora y la científica?
El trabajo manual me resulta
creativo a la vez que relajante. Ver el resultado tras personalizar un objeto
me parece muy relacionado con la poesía. Es creación al fin y al cabo. En
cuanto a la fotografía - además de ser un reto a la hora de conseguir algo
bello- me parece que está relacionado íntimamente con la poesía y también con
la ciencia. Como decía antes para escribir hay que mirar.
La poeta afirma que se encuentra en constante cambio |
Una experiencia interesante me
vino -de nuevo- de la mano de Rosa María Rodríguez Magda.
Cuando me dirigí a ella para
pedirle que escribiera el prólogo de Plomo
Papilas Pluma, le dije que quería que el libro llevase fotografías. Como
directora de la revista Debats , me
propuso participar en el número que se estaba elaborando sobre Ética y Ciencia
Me lancé al ruedo y estuve un mes
fotografiando , enloquecidamente, para ilustrar los artículos incluidos en la
revista. Fue muy divertido –por ejemplo- transformar una fuente en óvulo .
Gracias a esto conocí a Pompeo de
Vicienti responsable de la maquetación
de la revista y que magníficamente realizó el diseño de mi libro Plomo Papilas Pluma.
¿Podemos llegar a saber
quién es exactamente María José Pastor a través de su poesía?
Ni yo misma sé quién soy. A
través de mi poesía se conocerá mi faceta poética, es indudable que mis
sentimientos y pensamientos alimentan mis versos, no trato de ocultarlos. A
través de mi trabajo se conocerá mi faceta laboral, etc.
Todo metido en una coctelera y
agitado dará lugar a una bebida que aspiro a que resulte agradable. Pero si
pretenden definirme no creo que puedan, soy un constante cambio.
Soy un sujeto en tránsito soy
temblor y anhelo entre las palabras.
Inmersa estoy en la ingravidez
de lo indecible y de lo sagrado.
.
Retorno y tejo para contarte
trazos de espacios y de trayectos.