Es libre de manifestarse en el
campo que le apetezca. No se pone límites y dice que sigue siendo la misma
chica que llegó a Madrid a la conquista de sueños. Así es Nieves Vargas, actriz, poeta,
compositora y hoy narradora, que muy segura de sus posibilidades presenta su
primera novela Esperando la noche.
Te conocí como actriz, luego incursionaste en la poesía, prueba de ello
es el libro Poemas desgajados de la vida,
ahora das el salto a la narrativa con tu novela
Esperando la noche, ¿cuándo te sentiste lista para expresarte en
prosa? ¿La actuación estuvo antes, iba
paralela a la escritura o estuvieron siempre allí y se turnaron para salir?
Como bien dices, nos conocimos cuando me inicié en el teatro; buscando oportunidades
como todos en los noventa. Recuerdo perfectamente cuando me dijo el presidente
de la ANEA (Asociación Nacional de Escritores y Artistas del Perú) de ese
entonces, José Castro Pozo: “Nieves, tienes que conocer a una gran poeta y
escritora”.
Me haces regresar al pasado y miro mis inicios en el teatro. Por aquel
entonces, tenía el impulso propio de una joven. Fue una época maravillosa de la
cual tengo grandes vivencias. Sin
embargo, con el tiempo he adquirido experiencias nuevas, por supuesto.
Vengo de una familia aficionada desde siempre a la actuación, amantes
del buen teatro. Ellos han actuado en mi pueblo toda la vida. Lo anecdótico es
que yo jamás actué ahí.
Mi infancia estuvo inundada de la melodía de una vieja guitarra que hacía
sonar mi abuelo. Él y mi hermano fueron autodidactas. Mi abuelita cantaba y
mi madre heredó su timbre de voz. Como te darás cuenta, lo que hoy expreso, en un campo u en otro, lo he
heredado a través de los genes.
Durante una actuación con sus excompañeros de la ANEA |
¿Qué diferencias encuentras a la hora de expresarte en narrativa? ¿Cómo
se da el proceso de creación en cada uno de los casos?
La poesía nace sola en un determinado momento de la vida, cuando
atraviesas situaciones casi siempre difíciles. La narrativa es un suceso real o
imaginario; son procesos totalmente diferentes, opuestos; en uno interviene el
alma, en el otro la imaginación para dar forma a lo que se narra.
Sé que antes de decidirte por Esperando
la noche descartaste un par de novelas, ¿por qué? ¿Qué querías expresar que
no te daban aquellas historias? ¿Tendrán alguna oportunidad esas que dejaste de
lado?
Efectivamente, porque no era su
momento de salir a la luz. A todo autor le sucede, selecciona sus creaciones,
las va sacando de una a una. El orden no cambia su contenido.
Esperando la noche está
basada en la historia de alguien que conoces, según entiendo, ¿nos puedes
contar qué fue lo que te impactó de ese personaje de la vida real para que lo
llevaras al papel?
Esperando la noche es una
historia real. Puede parecer la simple vida de una joven, pero va más allá, es
profunda y humana. Me impactó conocer a un ser humano tierno, dulce, pacífico
con una vida llena de hechos terribles, casi imborrables.
¿Con qué te gustaría que se quedaran tus lectores al finalizar la
lectura de tu novela? ¿Buscas solo
entretener o invitas a la reflexión?
Obviamente con la ternura, con un mensaje de amistad. Lo resalto porque en estos tiempos que vivimos se ha perdido la
lealtad a los amigos. El sexo se consigue fácil, pero es difícil encontrar el
amor. Con esto quiero decirte que invito a la reflexión individual.
Desarrollando en Madrid una sus facetas: la actuación |
¿Eres una actriz que escribe o escritora que actúa? ¿Cómo te ves a ti
misma en cada una de tus facetas o roles?
Soy simplemente un pasajero de la
vida que lleva consigo un bagaje de sueños. Cada papel que he desempeñado en
estos años significaron momentos que me han dado grandes satisfacciones
personales; he conocido maravillosas personas, las cuales con el correr del
tiempo se convirtieron en grandes amigos.
¿La poeta Nieves Vargas seguirá escribiendo? ¿Qué aprendiste con la
publicación de Poemas desgajados de la vida? ¿La poesía es más exigente que la
narrativa?
Nieves Vargas sigue escribiendo poemas aunque no sé si llegue a
publicar. Déjame decirte que con ellos aprendí
algo muy importante. Pese a que vivimos rodeado de tantas cosas mecánicas, hay
buen porcentaje de personas que aman este arte (escribir poesía) y lo acunan como a un niño. Yo me alegro que sea
así, porque los poemas son un homenaje a la ternura olvidada.
No es que sea más exigente, la poesía es escribir con el corazón, los
sentimientos del alma, y una historia es
darle forma a la vida de otros jugando con la imaginación.
Haces unos meses aparcaste la actuación, sin embargo, me ha llegado la
noticia de que volverás haciendo algo novedoso, ¿nos puedes adelantar algo?
¿Cómo haces para enterarte de
mis nuevos retos? (ríe). Bueno, es un proyecto por estudiar, me plantearon
volver a los escenarios, pero nada concreto aún. Yo lo tomo como lo que es:
sólo una propuesta.
Apenas llegaste a Madrid te integraste a un grupo de teatro y nunca
paraste de trabajar, ¿qué lecciones has aprendido? ¿Cómo es el ambiente de
trabajo, qué te aportaron los compañeros que tuviste y a qué tipo de público te
enfrentaste?
Tuve suerte. Es difícil expresarlo, uno se llena de muchos
sentimientos encontrados. Pues, te diré que fue un ambiente muy agradable. Un
grupo receptivo y colaborador. Los compañeros se volvieron mis amigos,
confidentes. Son como mi familia en Madrid.
En cuanto al público, es gratificante hacer teatro porque los tienes
ahí, cerca, dando sus energías. Eso no tiene precio.
Su primer poemario publicado en España |
¿Ser una artista inmigrante te acarreó problemas a la hora de conseguir
una oportunidad en el mundo de la actuación?
No. Para nada, yo me he sentido
como en casa.
¿Es más complicado abrirse campo como actriz o escritor o es
exactamente lo mismo?
Son diferentes. Pero siempre hay público para todos. Sin embargo,
puedo decir que todo proyecto que se realiza encuentra piedras en el camino. Si
todo se obtiene fácil no tendría razón de ser.
El luchar por lograr un nombre en la vida, es lo realmente valioso. Lo
importante es que tus metas se hagan realidad y no se queden frustradas las
aspiraciones.
¿Vas encontrando tu camino en la literatura? ¿Tienes metas precisas en
este campo?
Pienso que he dado mis primeros pasos. El tiempo lo dirá. Como dice el
refrán: “Nada está dicho en esta vida”.
Hablar de metas es un camino lejano, por ahora tengo el placer de ir
de la mano con Esperando la Noche.
Escribir es una actividad solitaria, todo lo contrario que la
actuación, ¿eres una creadora que disfruta más de su soledad que de sus
momentos de interacción con la gente o te da exactamente igual?
Para mí todo está entrelazado: la gente y cuanto me rodea es el
complemento de inspiración secreta. Lógicamente se requiere soledad al
escribir, justamente es ahí el momento sublime que fluyen los relatos, la
poesía o una composición. Nada es igual. Una cosa lleva a la otra, como cada
persona es un mundo por descubrir.
Tu creatividad no tiene límites, lo digo porque además, de la actuación
y la literatura, has
ingresado a otro ámbito que es la composición. ¿Desde
cuándo te hallas esta actividad? ¿Qué
tipo de canciones escribes y sobre qué temas?
¿Es cierto que pronto grabarán tus canciones?
Con la autora de la nota tras la presentación de la obra |
Te confieso en secreto para que nadie se entere (risas) que lo primero
que escribí en mi vida, fue una canción para mi abuelita. Escribo desde siempre. No me he centrado en nada que limite libertades. Soy una hija de Succhurán (Cajamarca, Perú) y he nacido en libertad recorriendo aquel hermoso valle.
Está la propuesta. Solamente espero la respuesta de la cantante.
Has apuntado muy alto y quieres que en algún momento David Bisbal grabe
tus canciones. ¿Él lo sabe? ¿Qué temas
tienes preparados para su estilo?
Sí que me lo has puesto difícil. Eso para mí es un reto. Es un sueño,
y claro sería un privilegio. Él no lo sabe. Ni que existo. Son baladas para
todo aquel que cante ese género, pero también tengo valses, marineras, mulizas
y huaynos.
Si tuvieras que escoger ¿con cuál de tus facetas te quedarías y por
qué?
No escojo. Soy libre. Escribo sin impedimento y por placer. No quiero
ser como el pez que vive sólo en el agua. Sigo el consejo de mi madre: “Ve por
los caminos sin descansar, hasta alcanzar la cima del cerro más alto. Cuando
estés ahí arriba contempla la belleza del paisaje que te rodea, sin olvidar tus
raíces”.
¿Tus sueños van cumpliéndose o algunos se están resistiendo?
Los llevo de la mano.
¿Qué tanto queda de la chica que salió de Perú en busca de
oportunidades?
No he cambiado, soy la misma. Solamente
he aprendido a expresarlo.
Si desean saber más la autora pueden pinchar los siguientes enlaces: shttp://editorialcirculorojo.com/esperando-la-noche/ https://www.facebook.com/nieves.vegavargas?fref=t https://www.youtube.com/watch?v=sjGiUHq7uw4 |